Sombras del pasado cubren de espesa niebla Los restos de la inocencia de la triste ingenuidad Recuerdos de un ayer eclipsan la realidad Sombras que dijeron pertenecer a la cofradĂa del puñal Como pez de plomo que intenta no acabar fosilizado en la derrota en turbias aguas
Dejar el mundo de lo perdido, el reino de la sinrazĂłn Donde quien más dio fue quien menos recibiera Que la sabidurĂa llegue a tiempo de ser aplicada y conseguir abrir los ojos del ciego topo Encontrar el cauce de la vida entre el olor de las blancas camelias lejos de lo que fuera un barco sin rumbo